Cuquín
Todo un maestro de las travesuras, Cuquín es tan revoltoso, inquieto y juguetón, que es incapaz de parar quieto hasta en sus propios sueños. Allí, nadie puede decirle cómo hacer las cosas, o al menos, eso es lo que él piensa. Con tantos hermanos encima de él, es difícil llevar a cabo todas las trastadas que le gustaría. Es normal, que a su corta edad le guste jugar con todo lo que ve, aunque eso implique romper dos o tres platos por el camino o volver locos a sus hermanos.